“Un posible levantamiento de la vacunación contra la fiebre aftosa en el corto plazo representará un aumento de costos para el sector y no será compensada con mejores condiciones en el mercado internacional”, alertó el presidente de la Asociación Rural del Paraguay (ARP), Pedro Galli.
El dirigente afirmó que “el gremio no apoya la decisión de dejar de inmunizar en este momento ni en un futuro próximo”.
En declaraciones al diario ABC, Galli dijo que para la ganadería paraguaya es más accesible mantener un sistema de inmunización del stock bovino como prevención de la enfermedad, antes de financiar un sistema de control epidemiológico.
Un paso hacia dejar de vacunar
El mes pasado, la Organización Panamericana de la Salud y el Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (SENACSA) de Paraguay firmaron el Convenio Constitutivo para el establecimiento del banco regional de antígenos de fiebre aftosa (BANVACO).
Paraguay fue el primer país de Sudamérica que firmó el convenio del BANVACO, el cual requiere la participación de tres países para iniciar sus acciones como un proyecto regional. El objetivo es contar con un resguardo para eventuales focos, cuando el país deje de vacunar.
“Hoy estamos dando un paso realmente importante, estratégico en el proceso de transición de un status libre con vacunación a uno libre sin vacunación. En ese contexto, quiero destacar el liderazgo que tuvo Paraguay en ser el primero en sumarse a esta iniciativa”, puntualizó el Dr. José Carlos Martin, Presidente de SENACSA.
En diciembre de 2019, Paraguay anunció un cronograma de disminución gradual de la vacunación hasta llegar a cero. Si bien en su momento no se planteó una fecha para cumplir con ese fin, el horizonte tentativo era empezar un año después de que Mato Grosso, Brasil, deje de inmunizar.
Fuente: Valor Carne