Ante los reclamos de los productores por la presión fiscal, el funcionario habló sobre cómo está el vínculo entre el sector y el Gobierno.

El secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Jorge Solmi, sostuvo que “el grueso de los productores agropecuarios está pensando en trabajar y no en la protesta misma”. El funcionario lanzó sus declaraciones en un contexto de reclamos del sector primario por el proyecto de Ley de suba de Ganancias, la fuerte presión fiscal y los márgenes de rentabilidad de determinadas producciones.

“Hubo momentos con menor carga impositiva y los productores teníamos 14 millones de hectáreas hipotecadas y remates de campos. Hay que ver la situación fiscal también relacionada a los ingresos y egresos relativos de los productores”, afirmó.

“Aquí no son los mismo todos los productores y las regiones. Las políticas del Ministerio tienen que ser, incluso la fiscal, políticas segmentadas en relación al tamaño del productor y a la región de producción”, opinó el funcionario.

Además, agregó que «en todas las actividades hay protagonistas que están ideologizados, que militan en determinado partido político, pero el grueso, generalmente, no. Y como sucedió con las compensaciones, donde fue masivo el pago y no masiva la renuncia, creo que queda claro que al productor aquella cuestión que le sirve la aprovecha, y no le impone su ideología sino su voluntad de invertir”.

En relación a los pagos de compensaciones aún pendientes, sostuvo que su área está esperando «la nueva partida para asignar las compensaciones para aquellos productores que vendieron su producción luego de septiembre, que es la cuota que está faltando».

Jorge Solmi: el hombre de Sergio Massa en el ministerio de Agricultura que lleva adelante la tarea de diálogo con la Mesa de Enlace.

Jorge Solmi: el hombre de Sergio Massa en el ministerio de Agricultura que lleva adelante la tarea de diálogo con la Mesa de Enlace.

«Estamos trabajando con el Ministerio de Economía para ir resolviendo esta situación y se termine de pagar las compensaciones. Economía le está dando las últimas puntadas. En el grueso de los productores ya se realizaron todos los cruces, se han enviado los listados a Economía y cuando éste lo disponga, se le transferirá la compensación, adelantó.

Escenario político

No son pocos los focos de conflicto actuales y Solmi deberá ser un surfista ante un mar de reclamos, que nunca faltan entre los productores. Y que en los pocos meses del año se embravecieron ante los fantasmas de la intervención en los mercados.

“Este despacho está abierto para todos, escuchando las propuestas y los problemas que puedan surgir. Después, el Estado tiene que definir sus políticas y trabajar por el bienestar general”, afirmó en una entrevista con la agencia de noticias Télam.

También se refirió a los problemas de abastecimiento de granos, y qué paso en el mercado luego del cierre de exportaciones de maíz a principios de año.

“Hasta ahora no vemos ninguna tensión. Vemos que el mercado está ordenado. Ha sucedido una cosa muy particular y que no solo ocurrió en Argentina y es que apenas se terminó la cosecha, las partes, exportadores y molineros, tomaron sus posiciones inmediatamente, lo cual generó cierta tensión. Normalmente, la campaña de trigo se termina la cosecha en diciembre y los negocios se van haciendo a lo largo del año hasta llegar a la nueva cosecha. Esta vez los negocios se adelantaron y eso, fenómeno raro, trajo tensiones, pero se han resuelto y estamos trabajando bien y no vemos tensiones. Estimamos que vamos a llegar con el mismo estado hasta la cosecha de trigo de enero del año que viene sin ninguna perspectiva de conflicto.”, analizó.

La mirada en el trigo

“En la fina tenemos gran expectativa. Está todo dispuesto para que haya una muy buena campaña. Hay precios muy buenos y muchos productores ya se vienen calzando con esos valores a futuro. Estuvimos recorriendo y hablando con acopios, cooperativas y exportadores y todos están planteando esta situación, que es un momento excepcional para el cereal”, contó.

Además adelantó la idea de plasmar en un plan de créditos a través del Banco Nación y el Banco Provincia cuyo fin será el de aumentar el uso de las semillas fiscalizadas, en detrimento de las compradas en el mercado negro.

“La idea es que el productor se sienta confiado y pueda avanzar en una buena campaña de trigo”, resumió.

Fuente: A24